Tras los hechos de violencia y enfrentamiento ocurridos en el centro social autónomo "Planeta Guachimingo" ubicado en la calle el cobre N ° 8793 en Pudahuel, el día domingo 31 de agosto recién pasado exponemos:
Alrededor de las 16.00 hrs. de ese día, nos disponíamos a comenzar la actividad de celebración de un año de vida del centro social autónomo. Para esto se cerró la calle y se instaló una amplificación, mientras los niños ensayaban el baile que presentarían y la batucada se preparaba para tocar, se presentó una zapatilla que solicito la autorización emanada de la municipalidad, la cual no poseímos y nos interesaba tener, dentro de lo mismo cabe señalar que hace dos años realizamos este tipo de actividades político-sociales, sin algún tipo de permiso municipal, solo se cuenta con la autorización tácita de los vecinos cercanos. Tras nuestra negativa de retirar la instrumentaría, mientras ellos (los pacos) no explicaran la razón de la parcial suspensión de la actividad a los vecinos que esperaban dicho acto, los pacos procedieron a llamar refuerzos que demoraron menos de 5 minutos en presentarse en el lugar. El contingente provenía de la subcomisaría cabo Vera de pudahuel Sur, de la comisaria Tte. Merino y la 26° comisaría de pudahuel, este consistía en 4 retenes móviles, 3 zapatillas y un RP, más 4 motos. Estos comenzaron a retirar el escenario, y por otro lado un grupo de compañeros tuvo que retirar los equipos para que no sufrieran ningún daño. Paralelamente, a un vecino lo intentan detener por increpar verbalmente a las fuerzas policiales, es por esta causa inmediata que compañeros y vecinos comienzan a defenderlo, produciéndose un enfrentamiento entre fuerzas policiales y nosotros, los explotados que nos defendíamos del ataque de los pacos. Luego de 15 minutos de enfrentamiento, los heridos de nuestro lado fueron múltiples, se cuenta un compañero que perdió su diente, otra compañera con lesiones en cervicales, también 2 heridos producto de las armas con electroshock que poseían estos desclasados. Cinco de nuestros compañeros fueron detenidos en la 26° comisaría de Pudahuel, luego de constatar lesiones fueron vejados, maltratados y torturados. Pasado una hora y media del enfrentamiento se presentan en el centro social autónomo Planeta Guachimingo, 2 retenes y 2 zapatillas que fotografían y dibujan el lugar. Los hechos recién señalados solo afirman nuestras convicciones que se materializan en practicas concretas de destrucción a esta sociedad que está enferma, enferma de esclavitud asalariada, enferma de consumismo, enferma de indiferencia frente a la realidad que vivimos , que es una sola y es la constante guerra en la que estamos inmersos. Por un lado, nosotros los explotados, oprimidos, proletarios, los que solo tenemos nuestras manos para vivir; y nuestros enemigos, ellos: los poderosos, los ricos, la burguesía, aquellos que roban nuestras vidas y enriquecen sus bolsillos con nuestro trabajo. La actividad que se intentaba realizar trataba de romper con el orden impuesto, de romper con las lógicas del capital que día a día nos invade. Estamos en guerra y los poderosos se encargan de acallarla, de mantenernos dormidos en la pasividad con todos sus medios. Por un lado, la televisión que nos bombardea de farándula y noticias deformadas; tienen sus leyes y su justicia, que en lo concreto jamás existirá para el explotado y por sobre todo tienen su aparataje policial que esta siempre preparados para defender los intereses de los ricos y poderosos, y aniquilar a todo aquel que no quiera ser un esclavo del trabajo, todo aquel que salgo del modelo impuesto, todo aquel que decididamente quiera destruir este sistema de miseria y explotación. Durante estos hechos se vislumbró la posición concreta de los vecinos y sobretodo queremos hacer mención a todos y todas aquellas y aquellos que defendieron y atacaron frontalmente a las fuerzas represivas y apoyaron la defensa de este espacio. Por otro lado, queremos condenar y repudiar al vecino que realizó la llamada telefónica que fue la excusa perfecta para el accionar de los pacos y también condenar a los pocos vecinos que se aliaron a nuestro enemigo. Queremos hacer presente que en ningún momento se quiso comprometer la integridad física y síquica de los niños y niñas que se alistaban a bailar, ni de las personas que querían presenciar la actividad o simplemente pasaban por lugar, en todo momento nuestro voluntad y disposición era la protección de los mismos. Estos hechos afirman la necesidad de una vez por todas de pasar a la ofensiva y no seguir recibiendo los brutales golpes de la policía, ni los golpes cotidianos que la explotación del hombre por el hombre genera en todos y todas. Ninguna agresión sin respuesta. Saludos fraternos. Salud.
Alrededor de las 16.00 hrs. de ese día, nos disponíamos a comenzar la actividad de celebración de un año de vida del centro social autónomo. Para esto se cerró la calle y se instaló una amplificación, mientras los niños ensayaban el baile que presentarían y la batucada se preparaba para tocar, se presentó una zapatilla que solicito la autorización emanada de la municipalidad, la cual no poseímos y nos interesaba tener, dentro de lo mismo cabe señalar que hace dos años realizamos este tipo de actividades político-sociales, sin algún tipo de permiso municipal, solo se cuenta con la autorización tácita de los vecinos cercanos. Tras nuestra negativa de retirar la instrumentaría, mientras ellos (los pacos) no explicaran la razón de la parcial suspensión de la actividad a los vecinos que esperaban dicho acto, los pacos procedieron a llamar refuerzos que demoraron menos de 5 minutos en presentarse en el lugar. El contingente provenía de la subcomisaría cabo Vera de pudahuel Sur, de la comisaria Tte. Merino y la 26° comisaría de pudahuel, este consistía en 4 retenes móviles, 3 zapatillas y un RP, más 4 motos. Estos comenzaron a retirar el escenario, y por otro lado un grupo de compañeros tuvo que retirar los equipos para que no sufrieran ningún daño. Paralelamente, a un vecino lo intentan detener por increpar verbalmente a las fuerzas policiales, es por esta causa inmediata que compañeros y vecinos comienzan a defenderlo, produciéndose un enfrentamiento entre fuerzas policiales y nosotros, los explotados que nos defendíamos del ataque de los pacos. Luego de 15 minutos de enfrentamiento, los heridos de nuestro lado fueron múltiples, se cuenta un compañero que perdió su diente, otra compañera con lesiones en cervicales, también 2 heridos producto de las armas con electroshock que poseían estos desclasados. Cinco de nuestros compañeros fueron detenidos en la 26° comisaría de Pudahuel, luego de constatar lesiones fueron vejados, maltratados y torturados. Pasado una hora y media del enfrentamiento se presentan en el centro social autónomo Planeta Guachimingo, 2 retenes y 2 zapatillas que fotografían y dibujan el lugar. Los hechos recién señalados solo afirman nuestras convicciones que se materializan en practicas concretas de destrucción a esta sociedad que está enferma, enferma de esclavitud asalariada, enferma de consumismo, enferma de indiferencia frente a la realidad que vivimos , que es una sola y es la constante guerra en la que estamos inmersos. Por un lado, nosotros los explotados, oprimidos, proletarios, los que solo tenemos nuestras manos para vivir; y nuestros enemigos, ellos: los poderosos, los ricos, la burguesía, aquellos que roban nuestras vidas y enriquecen sus bolsillos con nuestro trabajo. La actividad que se intentaba realizar trataba de romper con el orden impuesto, de romper con las lógicas del capital que día a día nos invade. Estamos en guerra y los poderosos se encargan de acallarla, de mantenernos dormidos en la pasividad con todos sus medios. Por un lado, la televisión que nos bombardea de farándula y noticias deformadas; tienen sus leyes y su justicia, que en lo concreto jamás existirá para el explotado y por sobre todo tienen su aparataje policial que esta siempre preparados para defender los intereses de los ricos y poderosos, y aniquilar a todo aquel que no quiera ser un esclavo del trabajo, todo aquel que salgo del modelo impuesto, todo aquel que decididamente quiera destruir este sistema de miseria y explotación. Durante estos hechos se vislumbró la posición concreta de los vecinos y sobretodo queremos hacer mención a todos y todas aquellas y aquellos que defendieron y atacaron frontalmente a las fuerzas represivas y apoyaron la defensa de este espacio. Por otro lado, queremos condenar y repudiar al vecino que realizó la llamada telefónica que fue la excusa perfecta para el accionar de los pacos y también condenar a los pocos vecinos que se aliaron a nuestro enemigo. Queremos hacer presente que en ningún momento se quiso comprometer la integridad física y síquica de los niños y niñas que se alistaban a bailar, ni de las personas que querían presenciar la actividad o simplemente pasaban por lugar, en todo momento nuestro voluntad y disposición era la protección de los mismos. Estos hechos afirman la necesidad de una vez por todas de pasar a la ofensiva y no seguir recibiendo los brutales golpes de la policía, ni los golpes cotidianos que la explotación del hombre por el hombre genera en todos y todas. Ninguna agresión sin respuesta. Saludos fraternos. Salud.
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